domingo, 22 de junio de 2008

Hammam. Baño y masaje arabe

Mucho antes que los árabes, los romanos, los bizantinos, la gente nómada tenían sus propios rituales de baño. Aquellas tradiciones crearon un nuevo concepto en las formas y prácticas de baños como los hoy llamados baños termales o baños turcos.

El hammam (baño árabe), nos remite a un sentido hedonista de la vida. En Europa las practicas del baño publico tuvo su máximo esplendor en la sociedad romana antigua, la que fue decayendo junto a la caída del imperio pero a la que los pueblos islámicos la sostuvieron hasta nuestros días casi tal cual los antiguos baños.

El hammam o baño árabe seguía el modelo romano: una sala cálida como el “caldarium romano”, una templada o “tepidariun” y una fría o “frigidarium”, con hornos por debajo del suelo, para mantener la temperatura."Es un verdadero templo donde se le rinde culto al propio cuerpo con unciones fragantes, friegas y masajes, y los baños renovadores de energía y vitalidad. Con el agua que renueva la vida".

El hammam además del uso del agua combina cuatro elementos básicos, calor húmedo, calor seco, frío y masaje, no sólo sirve para limpiar el cuerpo, la piel, curar el estrés y relajarse, es también un lugar de encuentro social.